domingo, 25 de julio de 2010

En sesión


El menú de esta noche, sugiere enfado, tribulación y vacuidad, exclusivas especialidades de delicado sazón para consumidores refinados por ende; circunscriptos, y que su servidor degusta con cierta regularidad (de un tiempo para acá), ni siquiera debo requerir la carta, el gentil mesero de le Restorant reconoce mi persona y la atiende con solemnidad y brillante generosidad; - ¿Un Chateaux, un petillant, para comenzar distinguido caballero? Los entremeses de reflexión, el aderezo de la mordacidad o la ensalada de desquiciante humor a veces no logran el cometido de amalgamar los elementos con agrado, gusto y exquisitez, demasiada textura o cocimiento, el paladar degusta como si se tratara de cartón, ¿el vino? Un clarete noble, un plonk.

Buena mañana la de hoy, sin embargo un momento de arrebato le otorga turbiedad al esquema, le modifica a extraños momentos de ofuscación y negatividad, es cuando me reconozco; solo, frío, entumecido, las expectativas se traslucen rodeando el circuito cual neblina, tropiezo con árboles y cotas, encrucijadas donde en instantes resplandecía un bonito valle, luego pienso; - ¿no son demasiados mis cabildeos?, ¿he abusado de la sensibilidad de análisis por sobre la intuición?, ¿ahora que? heme aquí de nuevo intentando discernir, regresando a mi terapia de escribir, reproduciendo la pesadez de la jornada que no se acerca por mucho a lo que antes me comprometía, no me deja exhausto, no obstante debo sacarla, ignorarla seria generar, asimilar basura, mugre y ratas ja.


Hoy nada es irreversible, lo de hoy fue una buena sesión de diván.


Buena Noches

1 comentario:

Aura* dijo...

Siempre he pensado que escribir es un tanto terapéutico... sólo que algunas veces, los pensamientos e ideas son tan confusos que escribir se torna como una tarea demasiado pesada y ardua...
Aunque eso... seguramente ya lo sabes... se nota... que sabes, y creo que te gusta escribir...
je.. en mi humilde opinión, me gustó el menú de hoy...
Saludos Juan! no desaparezcas.. ;)